El estado de excepción regirá por un mes más en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y en un municipio en la región de Azuay.

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, extendió el viernes por 30 días más el estado de excepción en seis provincias y un municipio del país para hacer frente a la violencia e inseguridad de grupos criminales que hacen vida en la zona.

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Por medio del Decreto Ejecutivo 377, el mandatario ecuatoriano mantuvo por un mes más esta medida excepcional en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Orellana, Santa Elena, El Oro y en el municipio Camilo Ponce Enríquez, un enclave minero en la región de Azuay.

En diecinueve municipios de las provincias donde rige el estado de excepción se mantendrá un toque de queda que regirá entre las 22H00 y las 05H00 hora local.

A través del estado de excepción el Gobierno busca reforzar las estrategias y medidas implementadas por la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas «para precautelar la seguridad ciudadana».

El estado de excepción supone la suspensión de varios derechos fundamentales como la inviolabilidad del domicilio y restringe situaciones como reuniones, concentraciones o acciones similares que afecten la seguridad y el orden público.

Ecuador se volvió el primer país de Latinoamérica en homicidios per capita, con una tasa de 47.2 por cada 100.000 habitantes en 2023, producto del auge de la violencia de los grupos criminales, principalmente dedicados al narcotráfico.

Desde inicios del 2024, el presidente Noboa elevó la lucha contra el crimen organizado a la categoría de «conflicto armado interno», con lo que pasó a catalogar a estas bandas como grupos terroristas.

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